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Los hechos y su interpretación (2)

Otra vez a vueltas con los datos y su interpretación.

La alcaldesa de Pamplona anunció con el inicio del nuevo curso su decisión de separarse de su marido, arquitecto, al parecer, porque este salió en la tele enseñando una casita que tienen en Cantabria, valorada en dos millones de euros y puesta a todo plan.

Así que deduzco que no es que a Yolanda Barcina le parezca mal ser la máxima responsable política de una ciudad importante sumida en una crisis muy pesada y tener las espaldas cubiertas con un patrimonio jugoso. Que lo que le parece mal es que su marido la enseñe y la gente se entere. A saber qué puede pensar, con la cantidad de malpensados que hay en Pamplona, el mismo alto porcentaje que en España en su conjunto considerada.

Seguro que toda esa gente malpensada no ha tenido en cuenta el contexto.

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Las lágrimas se guardan para los entierros, y la vida hay que buscarla allí donde lo dejan a uno. En una casa buena de Cádiz o en el infierno. Donde sea, donde se pueda El asedio, de Arturo Pérez Reverte Esta es la sabiduría de Felipe Mojarra, salinero, de la Isla, de barro hasta las rodillas y que pelea contra el francés, en el año de 1811, en la Bahía de Cádiz, sin saber por qué. Y esa es la que buscaré compartir con vosotros cada mañana desde este rinconcito de la red. ¡Qué gusto volver a escribir!
Se me va poblando el cielo de rostros y corazones, se va volviendo mi hogar, llenándoseme de nombres. No es ya un extraño país lejano en el horizonte, es cita donde me aguardan pupilas que me conocen, labios que me dieron besos, pieles que llevan mis roces. Se me va poblando el cielo de rostros y corazones, de gestos ya conocidos de amor, de abrazos que acogen, en los que revivir puedo amadas palpitaciones, y tantos y tantos sueños que aguardan consumaciones. Se me va poblando el cielo de rostros y corazones: me gusta saber que Dios prepara para los hombres Paraísos que permiten recuperar los adioses. Allí se me van llegando uno a uno mis amores, con besos hoy silenciosos que tendrán resurrecciones. Se me va poblando el cielo de rostros y corazones, se va volviendo mi hogar, llenándoseme de nombres.