Egunon Mikel
este es un egunon escrito para el entrenador que llevas en la sangre.
Tener dos planes es fundamental en la vida, y para cada partido que planteas. Porque si las cosas no te salen como en el plan A, que es el bueno, hay que ir al B. Eso es lo que se llama, también, "tenerlo todo previsto".
Pero esto no se puede llevar a todos los terrenos, porque entonces se dicen tonterías. Lo digo por el Athletic. Los periodistas empeñados en que en el club confiesen que hay titulares y suplentes, y los jugadores y entrenadores empeñados en que de eso nada, que aquí todos son titulares.
Mal los dos. ¿La clave? Tener claro el objetivo final, que siempre está mas allá del partido del fin de semana, y que no es ganar cada día (¡cuánto daño ha hecho el partido a partido de Simeone!) sino, pongamos por caso, llegar lejos en la Europa League y en la Copa y clasificarse para jugar competición europea el año que viene. Y si eso pasa, la derrota de Alkmaar o la de Eibar, serán tan irrelevantes como el empate de la vuelta de la Supercopa en el Nou Camp. Porque las cosas se valoran al final.
¿O no?
este es un egunon escrito para el entrenador que llevas en la sangre.
Tener dos planes es fundamental en la vida, y para cada partido que planteas. Porque si las cosas no te salen como en el plan A, que es el bueno, hay que ir al B. Eso es lo que se llama, también, "tenerlo todo previsto".
Pero esto no se puede llevar a todos los terrenos, porque entonces se dicen tonterías. Lo digo por el Athletic. Los periodistas empeñados en que en el club confiesen que hay titulares y suplentes, y los jugadores y entrenadores empeñados en que de eso nada, que aquí todos son titulares.
Mal los dos. ¿La clave? Tener claro el objetivo final, que siempre está mas allá del partido del fin de semana, y que no es ganar cada día (¡cuánto daño ha hecho el partido a partido de Simeone!) sino, pongamos por caso, llegar lejos en la Europa League y en la Copa y clasificarse para jugar competición europea el año que viene. Y si eso pasa, la derrota de Alkmaar o la de Eibar, serán tan irrelevantes como el empate de la vuelta de la Supercopa en el Nou Camp. Porque las cosas se valoran al final.
¿O no?
Comentarios
Publicar un comentario