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Las cosas, en su sitio

Egun on, Mikel

Valverde deja de ser el entrenador del Athletic. Qué pena. Pena que se vaya y pena, también, muchas cosas que se oyen estos días, que parece que el Athletic se ha pasado cuatro años seguidos perdiendo tres a uno en el Calderón después de jugar mal al fútbol.

El corto plazo, se llama eso. Te condena a ir con unas gafas especiales con las que solo ves de cerca.





Si te las quitas, ves, primero, que Valverde es un extraordinario entrenador de fútbol, y ves también que haber estado seis años dirigiendo al Athletic hace más especial la historia de este club singular.

Segundo, que el Athletic es un equipo grande (de eso te das cuenta solo con pasear por las calles de Bilbao). Gane o pierda. Juegue bien o juegue mal. Y ves también que haber sido su entrenador durante seis años hace más bonita la historia personal de Ernesto Valverde.

Todo lo demás, partidos ganados, perdidos, errores y aciertos cometidos, son cosas de personas. Personas como el Txingurri y personas como las que dirigen el club. La vida, que no es más que una sucesión de alegrías y tristezas, de clasificaciones para Europa y de promociones de descenso.

Buen trabajo, mister, eta ikusi arte.

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